jueves, 26 de marzo de 2015

MORAL

La responsabilidad moral posee dos sentidos o dos momentos distintos. Actuar de forma éticamente responsable significa, en primer lugar, considerar, averiguar y asumir a priori las consecuencias de una norma ética. Esto se funda en que en el proceso argumentativo se reconocen a priori los intereses de todos los posibles afectados En segundo lugar, actuar responsablemente significa asumir el carácter "ideal" del principio ético, y por tanto, su diferencia o contradicción con las estructuras, procedimientos y normas de los consensos efectivos de la comunidad real.  Comportarnos sólo en función de la norma ética -especialmente si se trata de un comportamiento social- cuando no podemos suponer que todos los demás miembros de la comunidad lo hagan, y cuando más bien podemos suponer que actúan sólo estratégicamente, puede ser un comportamiento moralmente irresponsable.

ORIGENES

La sociedad primitiva y la sociedad antigua
Es una moral que surge cuando el hombre se aparta de vivir solo en la naturaleza para vivir en tribus donde no existían clases sociales, y nacen muchos fuentes de trabajos y todo lo que se producía era para la comunidad, esta moral colectivista, propia de sociedades primitivas que no conocen la propiedad privada ni la división de clases, es una moral única y valida para todos los miembros de la comunidad, al mismo tiempo que limitada a los límites de la gens o tribu. Todo lo que estuviera fuera de esa gens o tribu, era considerado extraño.

Con todo lo dicho anteriormente, podemos concluir en que la moral de las sociedades primitivas, no existen cualidades morales personales, ya que la moralidad del individuo era propiedad de la tribu, es decir, que la colectividad absorbe la moralidad individual del hombre primitivo.

Con el tiempo existieron grupos que producían más que otros lo cual produjo disputas y llevo al hombre a dividirse los bienes y aparece la propiedad privada donde existía una masa que tenia mas bienes y sometió a la otra que tenia menos y se dividió en dos clases sociales una de hombres libres y otra de esclavos y da inicio a la sociedad antigua donde solo importaba la morar de los hombres libres ya que se basaba en teorías y doctrinas de los grandes filósofos de aquella época, como por ejemplo Aristóteles el cual consideraba que unos hombres eran libres y otros esclavos por naturaleza, y que esta definición era justa y útil. Lo cual obligaba a los esclavos a tener una morar solo para ellos mismos en su forma de pensar y los obligaba a sentirse como objetos para serviles a los hombres libres.

La moral en la sociedad feudal
Es una morar que surge con el fin de la sociedad Antigua, donde aumenta la producción y la economía, aparecen 2 grandes clases sociales los señores feudales dueños de las tierras y los siervos los cuales estaban obligados a trabajar la tierra y gozaban de una porción mínima de los frutos que producían, aunque estaban en una situación muy dura por que se seguían restringiendo muchos derechos su calidad de vida mejoro mucho pues dejaron de considerarse como objetos y recibir un trato mejor, esta sociedad iba de la mano con la iglesia los cuales tenían un gran poder el cual fue cedido por la misma comunidad y eran los que ponían los códigos y normas morales que tenía que sujetarse la sociedad feudal.

La moral en la edad moderna
Con el surgimiento de la burguesía como nueva clase social, apareció también un nuevo modo de regular las relaciones entre los individuos, con lo que se gestaba también un cambio importante en la moral. Desaparecieron las trabas feudales para crear un mercado nacional único, y un estado centralizado que acabaran con la fragmentación económica y política.

Es esta época la de las grandes revoluciones liberales, que alcanza su expresión clásica a mediados del siglo XIX, y que tenia como ley fundamental la ley de la producción de plusvalía. Esta ley, cuyo único fin es buscar el máximo beneficio, generará una moral propia, en la que el culto al dinero y la tendencia a acumular los mayores beneficios, constituirá el caldo de cultivo para que entre los individuos florezcan sentimientos de egoísmo, hipocresía, cinismo e individualismo exacerbado.

Con la entrada del siglo XIX, se pasa de métodos brutales de explotación en el trabajo, a métodos más racionalizados y científicos, como los del trabajo en cadena. Se intenta inculcar en el obrero la idea de que, como ser humano, forma parte de la empresa, haciendo así que se olvide de la solidaridad con sus compañeros de clase, y conjugando sus intereses personales con los de su empresa. Es una moral común, la que se esta inculcando a los individuos, desprovista de todo contenido particular, con lo que contribuye a justificar y reforzar los intereses del sistema regido por la ley de la producción de plusvalía (citada anteriormente), y por lo tanto es una moral ajena a sus verdaderos intereses humanos y de clase.

En los tiempos modernos (a medida que los pueblos colonizados no se resignan a ser dominados), se echa mano de la moral para justificar la opresión. Se da una moral colonialista, que presenta como virtudes del colonizado lo que responde a los intereses del país opresor (resignación, fatalismo, humildad, pasividad), además de catar moralmente la haraganería, criminalidad, hipocresía y apego a la tradición de los pueblos colonizados, para justificar la necesidad de imponerle una civilización superior, es decir, imponerles su moral.

EL VALOR

El valor moral tiene una especial relación con el sujeto que actúa, en cuanto que lo hace con intencionalidad, con libertad y como consecuencia de un compromiso interno.
En el valor moral hay que distinguir un aspecto objetivo: la acción moral concreta, exteriorizada; y otro subjetivo: la buena o mala voluntad.
El valor moral está presente en todos los demás valores, sin privarles de su autonomía y sus peculiaridades, porque el hombre es ético (moral) por naturaleza y no puede renunciar a tener un comportamiento bueno o malo.
Por ser un valor eminentemente humano, condiciona a la persona en todas sus realizaciones. Se es hombre en la medida en que se cultivan los valores morales, que son la razón de ser del hombre. Son, por tanto, los valores más personalizadores.
Son constantes en la vida del hombre, no se acaban, no dependen de coyunturas, no se gastan. Realizan un ideal universalmente válido. Esto no significa que ese ideal no esté condicionado a la situación personal del sujeto. Así, por ejemplo, la monogamia es un valor moral de ley natural y, por tanto, universal, pero, sin embargo, en algunas épocas y lugares las costumbres polígamas han oscurecido este valor para los hombres de determinadas épocas y culturas.
Es muy importante establecer bien el principio de toda moral, ya que las consecuencias de este principio tendrán influencia en la vida de los hombres que lo sigan, pues según sea este principio, los modos de actuar, la conducta, será muy diferente.
Un ligero estudio de los principales sistemas de valoraciones morales servirá de importante ayuda sobre la importancia del constitutivo intrínseco del valor moral.

LA MORAL Y OTRAS FORMAS DE COMPORTAMIENTO

Moral y Religión
El comportamiento del hombre y de los grupos sociales, está regulado por determinadas acciones y actividades, unas de tipo material y otras de índole espiritual.

Creemos que las acciones que caen el campo espiritual son las que más influyen en la conducta personal y colectiva del hombre y del grupo social, entre las que se destacan la moral y la religión.

Moral y Política
Tiene ciertas distinciones. La política la mayor de las veces rebasa a la moral y la moral no puede ser política.
Culpar a un inocente no solo es injusto, sino moralmente reprobable, aunque sea por razones pequeñas.
Por la posición que adopte, consiste y libremente, dependerá del modo como sede las relaciones entre el individual y lo colectivo o entre la vida privada y la vida pública.

Moral y Derecho
La Moral y el Derecho hacen referencia a una parte importante del comportamiento humano y se expresan, en gran medida, con los mismos términos (deber, obligación, culpa, responsabilidad). Se puede decir que el contenido del Derecho tiene una clara dependencia de la moral social vigente, de la misma forma que toda moral social pretende contar con el refuerzo coactivo del Derecho para así lograr eficacia social.
Las teorías en relación con la Moral y el Derecho se pueden sintetizar de la siguiente manera:
·          Confusión entre ambos conceptos.
·          Separación tajante,
·          Consideración de ambos conceptos como distintos, sin perjuicio de las conexiones entre ambos.

LA OBLIGACIÓN MORAL

Una obligación normal es aquella que se originará en el inconsciente de cada persona, es decir, la razón ejerce una fuerte presión sobre la voluntad en relación o referencia a un determinado valor. Cuando un individuo capta un valor, la inteligencia inmediatamente interviene para que la razón se lo muestre a la voluntad y le proponga conseguirlo. Pero claro, al estar originada en la intimidad de cada persona, la obligación moral estará sujeta a las vivencias y experiencias personales del sujeto que la encarnará, por supuesto. Aún con el libre albedrío en alerta y en funcionamiento, el hombre siempre hará este ejercicio cuando detecte un valor, ya que libre albedrío y obligación moral conviven sin ningún tipo de problemas.

LA CONCIENCIA

La capacidad del ser humano para comportarse moralmente, llevando a cabo actos elegidos de forma libre, reflexionados racionalmente, asumiendo la responsabilidad de sus consecuencias, etc. es gracias a que el ser humano posee lo que se conoce como conciencia moral, una capacidad exclusivamente humana que nos hace capaces de distinguir entre lo correcto y lo incorrecto, lo bueno y lo malo, etc. Nuestra conciencia moral es capaz de juzgar nuestros propios actos, nos permite saber íntimamente, si actuamos bien o no, produciendo sentimientos de satisfacción o remordimientos y es la que nos hace sentirnos responsables de las consecuencias de nuestras acciones.
El hecho de experimentar remordimientos o satisfacción después de realizar ciertas acciones no es posible dudar de esta capacidad humana. Ahora bien, en lo que no hay acuerdo es en su origen:
·         Para unos pensadores, llamados naturalistas, la conciencia moral forma parte de la propia naturaleza racional humana, la cual es capaz de reflexionar sobre sus propios actos, valorarlos y darse a sí misma normas de conducta. Desde este punto de vista, nacemos ya con ciertas inclinaciones hacia lo bueno o lo malo, etc.
·         Para otros, los llamados convencionalistas, la conciencia moral se van formando poco a poco a lo largo de la vida como resultado de la influencia de la factores sociales como la familia y la educación o los amigos, políticos, económicos, los medios de comunicación, etc.

RESPONSABILIDAD

La responsabilidad moral posee dos sentidos o dos momentos distintos. Actuar de forma éticamente responsable significa, en primer lugar, considerar, averiguar y asumir a priori las consecuencias de una norma ética. Esto se funda en que en el proceso argumentativo se reconocen a priori los intereses de todos los posibles afectados. En segundo lugar, actuar responsablemente significa asumir el carácter "ideal" del principio ético, y por tanto, su diferencia o contradicción con las estructuras, procedimientos y normas de los consensos efectivos de la comunidad real.  Comportarnos sólo en función de la norma ética -especialmente si se trata de un comportamiento social- cuando no podemos suponer que todos los demás miembros de la comunidad lo hagan, y cuando más bien podemos suponer que actúan sólo estratégicamente, puede ser un comportamiento moralmente irresponsable.



Paginas de consulta: 
http://www.taringa.net/posts/info/13529828/Origenes-y-evolucion-de-la-moral.html
http://www.chasque.net/frontpage/relacion/anteriores/n146/moralyp.htm
http://www.gestion-sanitaria.com/2-moral-derecho.html
http://es.slideshare.net/ZairaGlez/la-moral-y-su-relacin-con-otras-reas